Lecciones aprendidas: detrás del éxito de las mejores emprendedoras

23.05.24 08:35 AM By Angel Samaniego

El número de empresas propiedad de latinos en Estados Unidos ha aumentado durante décadas. En 2022, más de 5 millones de empresas de propiedad latina generaron más de $800 mil millones en ingresos anualmente. Detrás de estas impresionantes estadísticas hay historias inspiradoras de empresarios latinos que han superado obstáculos y desafíos para tener éxito. Examinar sus trayectorias revela lecciones importantes para los aspirantes a propietarios de empresas.

Centrarse en resolver problemas reales

Muchos de los principales empresarios latinos comenzaron identificando brechas o problemas en el mercado y creando soluciones. Por ejemplo, Josie Natori vio la necesidad de lencería de alta gama para las mujeres latinas que reflejara su cultura y preferencias. Lanzó Natori, que se ha convertido en una marca líder, llenando ese nicho. De manera similar, Jorge Vergara reconoció la demanda de ingredientes y alimentos auténticos mexicanos en Estados Unidos, lo que lo llevó a crear Omnilife y Angel Sur. Los emprendedores más exitosos no crean empresas simplemente por tener un negocio; resuelven activamente problemas reales de los consumidores.

Comience con algo pequeño, luego escale

Rara vez las empresas de gran éxito empiezan de esa manera. La mayoría de los principales emprendedores enfatizan la importancia de comenzar poco a poco, perfeccionar el modelo y ampliarlo. El magnate tecnológico Carlos Slim, constantemente clasificado como una de las personas más ricas del mundo, aboga por el autoinversión en lugar de perseguir capital de riesgo. Sostiene que el crecimiento orgánico impulsado por las ganancias tempranas le permite controlar su visión en lugar de estar en deuda con los intereses de los inversores. De manera similar, los fundadores del gigante alimentario Gruma construyeron su imperio durante décadas reinvirtiendo sus ganancias iniciales para expandirse y adquirir lentamente empresas relacionadas. Si bien la ampliación rápida financiada con inversiones externas puede funcionar para algunos, la construcción incremental a partir de los primeros logros ha demostrado ser más sostenible.

Adopte la innovación y la agilidad

Para ser competitivas a largo plazo, las empresas deben ser innovadoras: desarrollar nuevos productos, servicios y modelos de negocio. Los principales empresarios latinos enfatizan que la agilidad y la apertura al cambio son claves para esa innovación. El fallecido Roberto Goizueta transformó a Coca-Cola en un gigante global moderno porque estaba dispuesto a romper con tradiciones arraigadas. Asumió riesgos con nuevos productos, empaques y estrategias de marketing que le reportaron miles de millones en ingresos adicionales. Asimismo, el fundador de El Banco, Manny Hernández, no creó simplemente “otro banco”; Innovó repetidamente a través de nuevas plataformas digitales para ayudar a las personas no bancarizadas a acceder a servicios financieros. Atascarse en el pensamiento de “cómo siempre se ha hecho” puede ser letal para los emprendedores: el mercado se mueve rápido y requiere agilidad.

Persistir a través del fracaso y la duda

Un hilo común entre los empresarios latinos más exitosos es la perseverancia y el valor que mostraron en sus viajes. Rara vez el camino fue lineal: la mayoría experimentó reveses, fracasos, dudas y detractores que cuestionaron su capacidad para hacer realidad sus sueños. Lo que los salvó fue la persistencia y la flexibilidad: la voluntad de cambiar de rumbo cuando fuera necesario sin darse por vencido. Por ejemplo, la reina de los cosméticos Gloria Rodríguez inició su primer negocio a los 19 años y fracasó. En lugar de renunciar, aceptó trabajos en importantes minoristas para aprender la industria. Lo intentó de nuevo más tarde y logró un gran éxito con Flor de Mayo y Zubi Beauty. Ese tipo de resiliencia de “nunca darse por vencido” se preserva a través de los desafíos inevitables del espíritu empresarial.

No hay substituto para trabajo duro

Sería difícil encontrar un empresario latino de gran éxito que no hiciera hincapié en el buen trabajo duro a la antigua usanza en su ascenso a la prominencia. Janet Murguía convirtió a Univisión de una pequeña estación de televisión en un gigante de los medios de comunicación a través de jornadas incesantes de 18 horas durante dos décadas. Roberto Goizueta habitualmente dedicaba jornadas de 12 a 16 horas llenas de reuniones, análisis y visitas al sitio. La trayectoria de tantos latinos –de origen inmigrante con recursos limitados– de la pobreza a la riqueza demuestra que el sueño americano sigue siendo alcanzable para quienes están dispuestos a trabajar incansablemente. Si bien los privilegios y las conexiones ofrecen algunos atajos, el esfuerzo sostenido impulsado por la pasión sigue siendo crucial.

Retribuir generosamente

Curiosamente, una vez que tienen éxito, la mayoría de los principales empresarios latinos se vuelven muy filantrópicos: contribuyendo a las comunidades y los intereses latinos. Habla de valores culturales en torno a la prosperidad compartida y a dejar las cosas mejor de lo que las encontró. Por ejemplo, Sol Trujillo ha comprometido más de $50 millones para apoyar la educación y el desarrollo del liderazgo en la comunidad latina. Eva Longoria cofundó Eva's Heroes para ayudar a las personas con discapacidad intelectual y respalda a muchas otras organizaciones latinas sin fines de lucro. No contentos con simplemente acumular riqueza, estos empresarios consideran que corresponde abrir puertas a quienes los siguen una vez que estén en condiciones de hacerlo.

Conclusión

En conclusión, si bien cada trayectoria empresarial es única, podemos extraer importantes lecciones compartidas de las historias de éxito de los principales líderes empresariales latinos de Estados Unidos. A medida que la población y el mercado latinos se vuelven cada vez más vitales en Estados Unidos, adoptar estos principios probados en el tiempo en torno a la resolución de problemas, la perseverancia, la innovación y el trabajo duro puede ayudar a garantizar que más empresarios latinos alcancen nuevas alturas. Hay una gran riqueza de tutoría y apoyo disponible por parte de quienes los precedieron.